¿Sientes que tu cabello está muy débil y su apariencia no te agrada del todo? Lo más probable es que sin darte cuenta, tengas hábitos que estén dañando a tu cabello diariamente. Te vamos a contar algunos de ellos para que puedas revisarlos y solucionarlos lo más rápido posible:
- Peinados muy tirantes:
Si eres de las que les encanta llevar cola de cabello o trenzas súper ajustadas todos los días, debes de saber que puede ser una causa por la que tu cabello se caiga. Si te gustan los recogidos, es mejor que no tenses tanto tu cabello y elige ese tipo de peinado solo en ocasiones puntuales.
- Ducharse con agua muy caliente:
Un baño con agua caliente puede brindarte una sensación relajante, pero procura no involucrar demasiado a tu cabello, ya que puede irritar e incluso dañar el cuero cabelludo a la vez que estimula las glándulas sebáceas, lo que hace que este produzca más grasa, volviéndolo más frágil.
- Frotar demasiado al secar con toalla:
Si haces esto, estás causando daños en las fibras capilares, lo que hace que se rompa con mayor facilidad. Para secarlo, puedes presionar la toalla con el cabello, pero nunca frotar. Lo más aconsejable es que uses un turbante-toalla de microfibra que absorba mejor y así evitar la presencia de más frizz en tus peinados.
- Peinar el cabello mojado:
Nuestro cabello es más frágil cuando está humedo, así que evita peinarlo mientras lo lavas, porque lo más probable es que se rompa. Te recomendamos usar un peine de dientes anchos para que desenredes antes y después de bañarte.
- Usar productos de fijación día tras día:
Muchos de los productos de styling o acabado contienen alcohol, lo cual hace que tu cabello se vuelva aspero a la vez que arrastra los aceites naturales. Si preguntas porque lo notas opaco, la respuesta está en el uso constante de sprays y lacas. Intenta probar cremas de peinado o serums que retengan el peinado, aportando brillo y reparando el cabello.
- Lastimar el cuero cabelludo con las uñas:
Esto se puede convertirse en un circulo vicioso y es más común de lo que se piensa. Debes saber que al rascar con tus uñas el cuero cabelludo, lo único que provocarás es irritación o inflamación. Con las yemas de tus dedos puedes dar pequeños masajes y es suficiente para que las bondades del shampoo que uses sean totalmente efectivas, sin lastimarte.
- Lavar el cabello todos los días:
El cabello pierde sus aceites naturales cada vez que lo lavas con productos que contienen sulfatos, lo cual también hace que pierda su vitalidad y brillo. Deja pasar de uno a dos días, dependiendo del tipo de cabello que tengas o actividad que realices y usa productos con composiciones veganas, sin sulfatos y sin parabenos para mantenerlo sano.
- Exceso de calor a diario:
La plancha y secadora pueden ser tus mejores aliadas y peores enemigas al mismo tiempo. Procura aplicar protector térmico e intenta reducir el uso de estas herramientas porque pueden acelerar la caída del cabello, volviéndolo quebradizo o provocando resesquedad. Estos son algunos de los malos hábitos que muchas tenemos en nuestras rutinas de cuidado, que pueden ser perjudiciales para la salud de nuestro cabello. Si quieres crear una rutina capilar con Olaplex, puedes consultar con nuestros asesores para guiarte con los pasos que tu cabello necesita.